
La propuesta planteada para las 83 viviendas establece una ordenación perpendiculara la fachada de la calle. Esta estrategia de ocupación de la parcela nos permite dos acciones principales: liberar espacio al fondo del solar, allí donde se produce un ensanchamiento, con objeto de proporcionar la máxima superficie libre para juegos y esparcimiento de las familias residentes; y facilitar las perspectivas y las comunicaciones físicas y visuales entre el espacio verde y el área de la calle. De este modo la zona verde propia del conjunto de las viviendas se acerca a la primera línea de la vida ciudadana, estableciendo una gradación de privacidades que suaviza el tránsito de la vía pública a la vivienda. La volumetría propuesta procede de un exhaustivo estudio de los retranqueosestablecidos por la normativa. Lo que empezaba siendo un conjunto de restricciones termina siendo uno de los mecanismos generadores de la forma del proyecto. Estos retranqueos proporcionan un juego de terrazas orientadas al sol y las vistas. Un cerramiento de doble capa multiplica las opciones de transparencia, visibilidad y soleamiento. Estas fachadas funcionan en verano proporcionando sombra y un espacio ventilado a las viviendas, mientras que en invierno se abren para captar el calor del sol. Los paneles ofrecen el juego plástico y espontáneo de unas fachadas multicapa en permanente evolución que reflejan la propia vida de los residentes en el interior de las viviendas.